Trastornos de la alimentación
Los trastornos de alimentación más conocidos hoy día son la anorexia y la bulimia aunque existen otros como el trastorno por atracón, vigorexia, etc..
Estos trastornos tienen una parte física evidente y una parte emocional mal entendida.
Los pacientes con trastorno de la alimentación están, en la mayoría de los casos, acostumbradas a depender de sus padres, de la sociedad, de las modas… y desconocen profundamente sus propios recursos internos. De ahí que lo único valioso suele ser lo exterior, el cuerpo, las formas. Llevándoles a descubrir su mundo interior, podrán descubrir lo valioso y bello que hay en ellos y ellas, sin necesidad de depender de la belleza exterior que, generalmente, hasta el momento, es casi lo único que conocen.
La terapia para los trastornos de alimentación para enfermedades como la anorexia o bulimia aborda muchos aspectos diferentes entre ellos que el paciente se de cuenta de cuáles son los beneficios que obtiene con la enfermedad. Hay muchos casos en los que el objetivo es llamar la atención y el trabajo estaría encaminado a descubrir a quién , cómo lo hace y para qué.
Para combatir los trastornos de alimentación el psicólogo o psicóloga trabajan las emociones facilitando la expresión de sentimientos de los que huye como: la ira, la ansiedad , la tristeza y los aspectos cognitivos como el valor que le da a la delgadez.
Durante la terapia se le recomienda la intervención conjunta de un especialista en nutrición ya que estas personas están tan centradas en adelgazar que muchas veces desconocen información básica sobre alimentación saludable. Esto será así, siempre y cuando no haya riesgo vital y el sujeto se encuentre sin ningún tipo de peligro físico. Si lo hay, deberemos cambiar el enfoque y comenzar por normalizar su estado , incluso recurrir a la internación en caso de ser necesario
El cuerpo y sus sensaciones son las que están anuladas , por lo que es primordial el trabajo con el mismo a través de ejercicios corporales que permitan una toma de contacto con sus necesidades físicas y afectivas y con ello se animen a explorar su propio cuerpo y a formarse una imagen real del mismo.
También es importante el trabajo con la familia y pareja en algunas sesiones , ya que en muchos casos los familiares no saben como apoyar a estas personas, la relación se ha deteriorado como consecuencia de la enfermedad y la comunicación entre todos es bastante difícil.